sábado, 21 de diciembre de 2024

 La gravedad de la artritis psoriásica no se correlaciona necesariamente con la gravedad de la enfermedad de la piel. Es importante examinar la piel del paciente en su totalidad, porque ocasionalmente los únicos signos clínicos de psoriasis pueden ser picaduras sutiles en las uñas, una placa intraglútea discreta, una sola mancha detrás de las orejas o una lesión aislada en el cuero cabelludo.

 La artritis de la psoriasis es generalmente menos dolorosa que la de la AR.

 La manifestación extraarticular más común de la espondilitis anquilosante es la uveítis anterior.

 La espondilitis asociada con la EII generalmente progresa independientemente de los brotes de EII.

 Auscultar en busca de soplos en una mujer joven que presenta hipertensión sistémica y pulsos radiales disminuidos. El hallazgo de múltiples soplos sugiere arteritis de Takayasu.

 El diagnóstico de fibromialgia debe cuestionarse en un paciente cuyos síntomas afecten las manos o cuyo examen físico demuestre una patología articular objetiva (articulación hinchada y al rojo vivo).

 La artritis psoriásica (AP) puede presentarse con varias manifestaciones clínicas: oligoartritis asimétrica, poliartritis simétrica (similar a AP), DIPitis (inflamación de las articulaciones interfalángicas distales), sacroileítis y artritis mutilante (que puede causar una destrucción desproporcionada al dolor). La poliartritis simétrica y la oligoartritis asimétrica son las formas más comunes de AP, mientras que la DIPitis (inflamación de las articulaciones interfalángicas distales; la forma más rara de AP) se asocia con picaduras en las uñas.